lunes, 26 de julio de 2010

Save blogger!

La primera vez que tuve blog fue cuando tenía 13 años, y si tuviera que escoger una edad que me haya gustado mucho diría que fue esa (y 16!!). Bueno, a los 13 años era muy sociable y no me intimidaba nadie y podía hablar con todos -ahora me intimidan los que saben demasiado y entonces no puedo decir nada- también me divertía facilmente, tenía muchos amigos y escuchaba música nueva (porque sí, me gustaba encontrar cosas nuevas). A los 16 me la pasé bien en la escuela, era cuando más me gustaba ir y nada me molestaba de ella, conocí a mis mejores amigas e hice muchas cosas geniales. No digo que no me guste tener 17 o 15, pero han sido edades intrascendentes para mí, digo, nada importante ha pasado.

Y el punto no eran las edades divertidas, sino los blogs. LOS BLOGS! Cuando tenía 13 y hacía algo instantáneamente pensaba en escribirlo... ¿será que antes era más pensante? Porque si es que así era por eso tenía la grandiosa capacidad de escribir lo que fuera, hasta si me encontraba a un perro moribundo en la calle (es un decir... muuuy exagerado). O tal vez no era más pensante, tal vez era menos! Y por eso podía escribir sobre cualquier estupidez que me pasara, porque no le tenía miedo a las críticas o no tenía otras cosas en qué pensar. Aunque tampoco debería de tener miedo a las críticas, porque al final nadie me dice nada, no creo que a alguien le importe mucho lo que escriba o no escriba, o que la vida de alguien dependa de eso. Entonces la conclusión es que sí era más pensante porque no pensaba en nada, y no pensar en nada es bueno!

Esta entrada debió de haberse llamado "Paréntesis e Interrupciones". O mejor no, creo que suena muy bien para una película o un disco!